Teniendo en cuenta el día de la filosofía,
planteemos una cuestión y ya que estamos, pensar sobre ella, ¿por qué no?
Imaginemos por un momento una niña de cuatro
años en una jaula, ha sido capturada y está gritando, no tiene claro lo que le
están haciendo, pero lo que sí sabe es que duele, duele mucho. Está confundida,
desorientada y tiene miedo. Viendo esto nos pueden venir a la mente muchas
cosas. Vamos a dar un paso más allá, ¿y si experimentamos con ella? Nos
horrorizaría sólo de pensarlo ¿no es así? Tan sólo pensar en lo que podría
sufrir... Aunque parece que esta parte de la historia ha quedado atrás (desde
los experimentos nazis), sigue muy presente en la actualidad.
¿Por qué nos aterra la experimentación en
humanos y no en animales? ¿Acaso ellos no sufren, no sienten, no son
conscientes? La respuesta que daríamos la mayoría es sencilla, nosotros somos
humanos y los animales no. Entonces, el hecho de pertenecer a una determinada
especie nos hace idóneos o no para la experimentación. Esto es simplemente
discriminar a seres vivos por ser de una determinada especie, ¿por qué no
discriminamos por raza o por sexo? ¿Acaso elegimos nosotros en qué especie
nacer? Entonces si tenemos la mala suerte de nacer conejos, ¿sería ético y
lógico que experimentaran con nosotros, que nos inyecten enfermedades, que
prueben pastillas?
Lo que ahora puede que estén pensando, es que
sin la experimentación, no habría avances en la ciencia, es más lógico pensar
que cuando tomamos algún tipo de medicamento, está comprobado que no nos hará
daño, ni tendrá unos efectos secundarios desmesurados. Y no andamos desencaminados,
aunque lo más increíble es que no es necesario que los animales sufran, es más,
existen muchas alternativas para no experimentar con ellos, ¿y por qué no lo
hacemos? Simplemente por la complicidad económica y la comodidad, da pereza
hacer estudios en células, ya que tenemos al animal entero ¿qué más da? Pues
no, no da igual, ellos sienten el dolor tanto como nosotros. ¿Es ético hacer
que otros seres vivos, humanos o no, sufran sin tener porqué?
Sara Maneiro Santamaría 1º BI L
No hay comentarios:
Publicar un comentario