Actualmente, en España, estamos sufriendo la confrontación de dos ideas que han conseguido crear una brecha ideológica en nuestro país.
Ultimamente parece que o bien encajas en un perfil más conservador, defendiendo la unidad de el país y apoyando las medidas tomadas por el gobierno, o directamente pasa al bando opuesto argumentando la separación por una supuesta gran opresión a ciertas comunidades autónomas, sobre las que injustamente el gobierno actúa contra ellas.
¿Es que acaso uno no puede sentirse, español gallego o incluso europeo a la vez?¿Significa ser español, apoyar a un gobierno con el que no compartes unos mismos valores?¿O debo tomarme la justicia por mi cuenta y separarme por el mero hecho de no compartirlos? Ciudadanos de toda España, han tenido grandes dudas, y conflictos culturales e incluso personales, sobre donde posicionarse frente a esta situación.
Pero ahí esta la gran cuestión ¿Se debe mezclar una cuestión de identidad cultural con una cuestión de división política?
Gracias a todos los progresos históricos, las sociedades cada vez más conectadas y unidas, han conseguido mayoritariamente, crear un mundo más globalizado, donde tu procedencia no es un factor determinante en la integración. Al estar limitando una comunidad, a un simple vínculo cultural, estamos a su vez cerrando fronteras y excluyendo a todos aquellos que pretenden participar en esta comunidad, a pesar de no compartir las mismas raíces de procedencia.
Nacionalismos nacidos cada vez con más frecuencia en la Union Europea se apoyan en este tipo de argumentaciones, cuando mezclar una cuestión de origen cultural con intereses políticos, limita a una sociedad. Personalmente opino que son las sociedades más diversas a su vez las más enriquecidas.
Tomemos como ejemplo, que tiene España culturalmente que ver con Alemania, con Holanda o mismo con Suecia, sin embargo todas son miembros de una Unión Europea que a pesar de ser creada principalmente por un interés económico, facilita las conexiones de estos países, creando una sociedad multicultural, diversa y en progreso, en la que sus ciudadanos no se limitan a compartir una lengua, tradición o mismo una religión sino que comparten unos intereses políticos que benefician el desenvolvimiento, ya no solo de el propio país, sino también de la comunidad común. Concreto que me refiero a la política interior de dicha comunidad, ya que a veces la propia Comunidad Europea, no ha mostrado el apoyo internacional esperado en cuanto a su política exterior.
Por eso debemos recordar que cerrar fronteras, nunca ayudará a ninguna comunidad a desenvolverse en su totalidad sino que creara de ella una comunidad excluyente frente a un mundo en el que cada vez más se debería estar buscando una unión que permita igualarnos a todos, a pesar de nuestras diversidades personales.
Xoana García Fernández 1ºF
No hay comentarios:
Publicar un comentario