jueves, 17 de abril de 2014

CRITICANDO A LOS QUE CRITICAN

El interés. Dos palabras, una de ellas habla por si sola sin necesidad de la acompañante. Interés, a veces puede motivar, otras hacer que logres tus objetivos y que acabes perdiendo otros más importantes, pero, en este caso, hablaremos del interés que mostramos hacia situaciones y lo que este puede provocar.
El otro día fui testigo de este tipo de interés, en una excursión al parlamento de Galicia. Se podría decir que de allí sacaríamos temas muy diversos a cerca del comportamiento de los que allí estaban y que chocó bastante con las apariencias que muestran de cara a la galería, pero como dije, me centraré en el hecho de que es vergonzoso que un gobierno, que debería de quedarse a escuchar todas y cada unas de las quejas, opiniones y aportaciones que allí suceden, se levante y se marche cuando el tiempo estipulado para que se puedan expresar los partidos que no están gobernado se acabe. Dicen que hacen política cuando lo que realmente hacen es acusarse los unos a los otros de lo que hicieron durante sus mandatos. Uno pregunta ¿Qué pasa con la subida de la luz? Y el otro responde: ¿Qué  pasó con la luz en tu gobierno? Y, por lo menos, esta respuesta tiene algo que ver con su pregunta, porque la mayoría ni si quiera estaban relacionadas. Al terminar el tiempo, el gobierno vigente se marcha mientras los demás siguen hablando, ¿para qué? Si los que mandan se han marchado, ¿Quién te va a escuchar? Pues los que allí se queden, que por otra parte poco podrán hacer si los que pueden cambiar las cosas se marchan. Y bien, ¿Qué saqué en claro?, ¿Lo que ocurrió realmente con la subida de la luz?; No. Lo que saqué en claro fue la falta de interés que hay allí, unos puede que si que lo muestren pero desde luego, la inmensa mayoría no dan señal alguna de ello. En definitiva aquí estoy, criticando el comportamiento de los que se critican mutuamente y todavía sigo sin comprender cual es el objetivo final de estas personas, a lo único que he podido llegar, por el momento, es que critican por criticar, ya que no tienen soluciones para los problemas de la sociedad y que allí se tratan sin éxito.
                                                                                                                                                                                                                                                                                                        Antía Valiño 1º BI 

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