jueves, 9 de octubre de 2014

Alucina

Que las sustancias alucinógenas son consumidas por artistas, científicos y otros profesionales que requieren de una gran dosis de creatividad e imaginación es un hecho. Algunos genios de la actualidad alcanzan el estado de inspiración gracias a estos productos que estimulan el cerebro, alejando al individuo de la realidad y sumiéndolo en un entorno totalmente diferente del que está habituado. Estas drogas ayudan a romper las barreras impuestas por nuestro conocimiento previo, permitiendo así un mundo de posibilidades que a priori serían difíciles de comprender. Los alucinógenos facilitan que nos cuestionemos lo que conocemos y que demos cuerda a otros pensamientos, de modo que podamos expandir nuestra mente para abarcar nuevos conocimientos. Si esto es así, ¿Podríamos considerar que las alucinaciones son una forma de conocimiento? Es posible. Al igual que los sueños, las alucinaciones han sido fuente de gran inspiración para descubrimientos, pinturas, composiciones musicales totalmente innovadoras y otras tantas obras artísticas, por lo que aceptar estas visiones como método para saber no sería algo descabellado. De hecho, iconos del mundo actual como pueden ser Bill Gates o Steve Jobs afirman haber consumido LSD, y en el caso del co-fundador de Apple llegó a declarar que este estupefaciente fue una de las causas del cambio en su vida.




Por último, quiero indicar que la finalidad de esta entrada no es promover el consumo de drogas ilegales, sino de profundizar en cuestiones filosóficas.
   


Jacobo Osorio, 1º BI



2 comentarios:

  1. El uso de las drogas en esta teoría está sobrevalorado. Es decir, ¿Cuántas personas en el mundo se drogan? Sólo andando por la calle podemos cruzarnos con mucha gente que se droga, de muchas maneras diversas, tanto los que lo hacen "contra el estrés", cómo los que lo hacen para divertirse, o aquellos que realmente son drogadictos.
    Bien, prosigamos, de todas estas personas, que vemos usualmente, ¿Cuántas creemos que han visto conocimientos en sus experiencias con dichas substancias? ¿Son más inteligentes, han diseñado o inventado algo más creativo, que alguien que no se drogue? No creo que la respuesta sea sí ni en la mitad de los casos, ni siquiera en un cuarto. De hecho las drogas están mal vistas en general, y cuando vemos a alguien drogado no vamos a ver como nos predice el futuro o a que nos dé lecciones de vida.
    Por lo tanto, estas personas que se ponen como ejemplo no son personas cualquiera que tomando drogas hayan tenido revelaciones divinas. Son personas estudiosas y creativas, que tienen ya una base más que formada, y en las que el hecho de que haya consumiendo drogas no hubiese casi tenido relevancia a la hora de su trabajo. Si siguiésemos ese patrón de: consumes LSD y te conviertes en un genio; entonces todos los artistas a lo largo de su vida lo habrían hecho, es una vía fácil para el éxito. Pero esto no es así pues para conseguir un objetivo creativo, no consiste en tomar drogas para ampliar fronteras, sino en ser bueno en lo que uno hace y tener talento. Para abrir fronteras, sólo hay que abrir la mente, y eso se puede conseguir por uno mismo sin uso de estupefaciente alguno. Tan sólo hay que observar a Dalí, al cuál muchas veces se le preguntó por si usaba drogas, y el contestó:"yo no me drogo ¡yo soy la droga!"

    Sandra Gigirey 1ª BI

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    1. La droga no crea al genio, sino que lo estimula. Es evidente que por tomar drogas no vas a adquirir conocimientos de forma súbita, es decir, no vas a hablar chino de forma fluido por el mero hecho de consumir estos estupefacientes por ejemplo. Hay ocasiones en las que los artistas carecen de inspiración, y esto puede ser debido a factores psicológicos. Los alucinógenos ayudan a que estos factores se disipen parcialmente y permiten que el artista se pueda concentrar mejor en la creación de su obra.

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