miércoles, 10 de diciembre de 2014

Responsable, pero ¿estable?

Llevamos ya varias semanas tratando en clase de filosofía el tema "adolescencia" y esta mañana en concreto, la madurez. Llegamos a una conclusión clara, un ser maduro, es aquel ser responsable, altruista y autónomo. Del mismo modo que todos coincidimos con lo anterior, nos surgió un debate.
 Un ser responsable es aquel dueño de sus propios actos, que es consciente de lo que hace, conoce y valora las consecuencias de sus actos, es capaz de controlar los impulsos o deseos, cumple sus obligaciones, y ahora el motivo del dicho debate, en la hoja que el profesor nos repartió, se habla de que una persona es responsable cuando tiene una estabilidad afectiva, es decir, no oscila continuamente, no pasa de alegre a triste. ¿Un ser responsable puede tener oscilaciones emocionales pero sin que afecten a sus actos?  ¿Es necesario ser estable afectivamente para ser responsable?

3 comentarios:

  1. Es muy complicado mantenerse controlado todo el tiempo y, por lo tanto, siempre podemos encontrarnos en una situación en la que no tenemos nuestras emociones, por así decirlo, 'atadas en corto'. Ahí es cuando tenemos que demostrar esa capacidad de reflexionar, dejando a un lado influencias externas y centrándonos en el problema que se nos presenta y como solucionarlo. Con esto quiero decir, que si con 'estable' buscas hacer referencia a ese control que mantenemos sobre los sentimientos a la hora de decidir, valorando lo que sucede en sí y no lo que esto nos hace sentir, entonces sí, no podríamos ser responsables sin esa estabilidad, y por lo tanto, careceríamos de dicha madurez.

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    1. Estoy de acuerdo contigo, pero una persona madura es capaz de tomar decisiones y opinar de manera razonable en cualquier momento. Quiero decir, una persona que se defina como madura no cambia de opiniones dependiendo de su estado de ánimo, esto último no debe influir a la hora de tomar decisiones y opinar, dándole la vuelta, una persona madura es aquella que aún con variaciones de este tipo, se mantiene firme.

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  2. Las emociones forman parte de lo que conocemos como ser humano. Concebir a este sin ellas es como tratar de hacer una tortilla sin huevos. Yendo más allá, las emociones provocan en ocasiones el sentimiento de responsabilidad. Pongo un ejemplo quizás un poco desacertado, pero creo que se puede entender: cuando tienes una mascota sientes la responsabilidad de protegerla, normalmente porque le tienes un afecto. Si no existiese este cariño hacia el animal, ¿Sentiríamos la responsabilidad de cuidar de él? ¿Un robot sentiría esa necesidad de estar atento para que no se dañase? Probablemente no, porque al carecer de emociones y sentimientos es improbable que tenga esa necesidad de responsabilidad.

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